martes, 22 de marzo de 2016

El día que dejó su facebook abierto.

El día que dejó su facebook abierto.
El día que dejó su facebook abierto, no pude evitar con curiosidad mirar entre sus tantas conversaciones. Veníamos de besos, abrazos, caricias y yo viajaba hacia atrás -asqueado de sus cosas y sus palabras- cada vez que el cursor revelaba un “te llevo té” ¿te llevo té?. ¿le llevás té? ¡andá! ¡andá y pregúntame con coraje si hablo de vos!. Me quité la camisa, guardé algunos motivos para volver a hablarte en mi mochila, le hablé a unas tantas. Pacte citas, necesitaba sentir que intento borrar. Al final tenés razón, lo tuyo es el turismo emocional, andar de un corazón a otro derritiendo con letras, llevar tés, señorita del servicio.
Tenés razón porque eso es lo que querés, al final no soy diferente de esos idiotas que te han tocado con intención de hacerte daño, de prepararte. Y fui tan idiota de llevarte conmigo, de dejar que vinieras, que vinieras a mi cuerpo, que lo disfrutaras, de besarte con la pasión que a otros les falta.
Tenía razón, debí de haberlas borrado. Todas y cada una de las fotos. Era un acto de venganza, exclusivo para el momento en que querás mirar tu teléfono y ahí esté yo. Y tengás que pensar si borrarlas o no. Y borrarlas con certeza o guardarlas esperándola. Un idiota muy dulce. Un idiota que te compartirá estas letras y que no va a responder ninguna pregunta. 
Y él –mi amigo, al que le he contado todo-también tenía razón, esto es patético
Quizás yo soy patético, quizás siempre lo he sido. Quizás sólo quise arrastrarte a las puertas de mi mundo y tirarte lejos de aquí.
Quizás esa fue la única manera que te quise, en la que te quiero, en la que voy a quererte.
Debiste anticiparlo neni, mis miradas despectivas están llenas de dulzura, de cariño, de una apariencia de quietud.
Y lo mejor que puedes hacer vos, es guardar silencio.
Como es lógico, estoy lleno de resentimiento, soy un resentido y esto no hace sino alargar la lista de cosas que me hacen un hijo de puta.
Game over.
Game Again?
¡Qué talento para herir Dahiana! ¡Qué talento!

Cuento corto





Para ver el mundo en un grano de arena,
Y el Cielo en una flor silvestre,
Abarca el infinito en la palma de tu mano 
Y la eternidad en una hora
.
William Blake

Y mientras duerme la princesa, el caballero la espera.. La aguarda.
Toma de su saco un deseo,
y lo guarda en la ventana,
espera la media noche,
rogando al cielo y a la estrella lejana,
pide con todas sus fuerzas,
dejar de ser una rana. Pero al otro dia ella duerme,
y el no llega para verla,
espera,
siempre espera,
el dia para tenerla. Y dice junto a la cama:
- Cuando me mire y sepa,
que "caballero y rana", 
son cosas insignificantes 
cuando uno ama con toda el alma. 
Que ser pobre no es deshora , 
deshonra es no admirarla,
que la plata se consigue, 
que uno vuela sin alas. 
Que uno puede amar, 
sin necesidad de tener nada. La princesa sigue en sueño, 
El no deja de pensarla, 
más allá de su maquillaje Él sabe, èl lo sabe, 
que no tiene maquillaje su alma. Que no es su cara,
que no es su ropa,
que no es nada que no puede compararla,
que debe tener fé en el deseo,
en esa estrella lejana…

¿En qué radica la libertad?

Libertad, quizá es una palabra mas que se adhiere a nuestra garganta sonora rítmica y hueca. Agujerando trazo de ilusiones entre burbujas de letal gas que al reventarse queman una verdad; Hiere y cuan rustica falacia es esta vil palabra libertad; definida por quien, nadie sabe, suena tan limpia tan simplemente llena de nada. desgraciada que contagia con anhelos nuestro espíritu sangrante como leguleyas satisfactorias representas a un sin fin de saharas.

Porqué existe "Libertad" Quizá lo haces para darme sueños inalcanzables, utópicos; me empollas como larva que escudriña y escudriña, hallando en su ultimo y efímero movimiento alas, alas llenas de imperturbable, contradictoria e inagotable aire de Libertad; en ello radicas volar sin alas simplemente volar.    

lunes, 21 de marzo de 2016

Pena...

Pena, según la RAE podríamos decir que es vergüenza, pudor, culpa, timidez. La pena la podríamos resumir como esa sensación maldita que aveces nos impide hacer cosas que en realidad queremos o deseamos realizar, experimentar o vivir pero que puede mas el pudor o el miedo al ridículo, al rechazo.

¿Cuantos besos hemos dejado de dar o recibir por pena?, ¿cuantas exposiciones académicas o laborales nos hemos arruinado por pena? ¿cuantas oportunidades perdidas?. Tan difícil que es liberarse de ella y cuan gratificante es cuando se hace, las sensaciones son magnificas, por ejemplo cuantos magníficos besos se han dado venciendo la pena, mordiscos, masajes, incluso cuantas deliciosas y no planeadas invitaciones y salidas hemos vivido una vez vencida la pena.


Usando el otro significado que la RAE le da a esta palabra, da pena como pasan experiencias nunca vividas por culpa de ese sentimiento que llega a dominar toda nuestra vida. Desafortunadamente la única solución para esta situación es enfrentándola de frente, con el tiempo, se le pierde el miedo e incluso, se llega a necesitar estar en esas situaciones por que la adrenalina que produce se puede volver adictiva.

El problema está en enfrentarla, ¿como vencer la pena de actuar si precisamente la forma de hacerlo es actuando?. Quizá, aprendiendo a ser seguros, preparándose, aprendiendo de las derrotas y las victorias pero sobre todo con el tiempo. Nada se pierde con intentar, por el contrario, se adquiere experiencia ya que hasta de las malas experiencias podemos sacar lecciones de vida. Así que, ¿que esperas?

sábado, 12 de marzo de 2016

2016-1 pinta bien

Hasta hace unas semanas deseaba reingresar a la universidad de una manera que jamas había sentido, la ansiedad me dominaba y los días se me hacían eternos, en ese momento no lograba entender exactamente a que se debía esto pues la universidad incluye compromisos ineludibles que normalmente te dejan sin tiempo, ahora, una vez estoy adentro lleno de compromisos, sin un minuto para mi, sin tiempo, con mas tareas por realizar que tiempo para ejecutarlas, me doy cuenta de que la razón de mi ansiedad era la necesidad de hacer algo y la falta de mis compañeros. ¿quien iba a pensar que iba a extrañar tanto a algunas personas? ¿quien iba a pensar que iba a conocer a otras más que poco a poco se han ido metiendo en mi corazón?.

Este semestre pinta bien, comenzó un poco turbulento en algunas cuestiones pero es solo cuestión de ajustar un poco algunas cosas. Ahora que se comienzan nuevos rumbos espero poder ser útil para el grupo de investigación, para mi grupo de estudios y continuar mejorando en mi trabajo que debo reconocer ha ido mejorando a paso lento pero seguro.


Caminar, ¡Ami me gusta!

Cambio de planes, le iba a visitar a su casa y terminamos en el parque. 

Conoces por coincidencia a una persona y sales a caminar con ella, no te das cuenta en que momento y de la nada comienzas a hablar con ella todo el tiempo, como si fuera una necesidad; por alguna razón te sientes cómodo a su lado, algo  que no pasa con mucha frecuencia con otras personas. Sientes la necesidad de estar ahí, de ayudar, de saber de esa persona, de estar presente y de involucrarla con tu vida, algo que no es muy frecuente. ¿Que pasa? ¿A que se debe? no lo se, pero es bonito vivir ese tipo de coincidencias, hablar con alguien por teléfono por horas y horas y a pesar de los problemas de tiempo y demás, demostrar que en persona la cosa puede ser igual de fluida pero mejor ya que puedes disfrutar de su calidez y de su grata sonrisa.

Debo decir que Ami me gusta este tipo de cosas; el solo hecho de que mi mal genio no explote o se detenga inmediatamente con esa persona lo veo como algo muy positivo, al igual que sentirme mal por tan solo intentar explotar con esa persona.

Ojalá pueda repetir esos planes y las charlas se alarguen...