lunes, 19 de diciembre de 2016

¿Por qué no creer?

¿Por qué  pensamos en tener una vida perfecta?     
¿Qué la hace tan deseable?
¿Por que no se disfruta de los errores?
¿Por qué no actuar?
¿Por qué no ser diligentes?
¿Por qué algo predecible?
¿Por qué no confiar?
¿Por qué no tener fe?
¿Porqué desear lo que el otro tiene?
¿Porque se prefiere quitar en vez de compartir?
¿Porque no se edifica en vez de destruir?

¿Por qué agredir?
¿Por qué ilusionar?
¿Por qué mentir?
¿Por qué ignorar?
¿Por qué dejar de sentir?
¿Por qué no creer?

Tú, el oasis de mi desierto.


En ocasiones nos equivocamos estúpidamente, pensando que esa persona podría ser la indicada, porque quizá tenga un pensamiento diferente y su discurso sea el que se considere ideal para esta persona que lo escucha, pero lo triste del asunto es que en muchas ocasiones el discurso de aquel fulano o aquella fulana es espectacular, sin embargo no tiene coherencia alguna con aquello que practica o que piensa en su interior, muchos les dicen morrongos, otros asolapados y supongo que existen muchas palabras para referirse a esas personas.

En ocasiones llevamos bastante tiempo esperando a una persona con la que valga la pena trasnochar, reírse, pasar su tiempo, compartir juntos y demás y tal vez se aparece aquel fulano o fulana como un oasis en nuestro desierto, ese desierto emocional llamado corazón.

Y es tan sólo eso un oasis, un espejismo, en el cual nos sumergimos pero llega el momento en que tragamos tierra en vez de agua y nos damos cuenta lo cegados que estuvimos al no reconocer la realidad.


miércoles, 7 de diciembre de 2016

Buñuelos

Por tercer año consecutivo el siete de diciembre cenamos buñuelos en casa. Este a diferencia del anterior no tenemos luces navideñas. Algunos problemas y demás nos han impedido pasar un mejor fin de año. Esto no ha sido un impedimento para que mi mamá como cada año desde que tengo memoria me ponga a prender velas y colocar faroles, aun en contra de lo que pienso de eso.

Pero volvamos a los buñuelos, hasta hace tres años los hacíamos con la típica "Colmaiz". Esta es una harina comercial en Colombia que se usa únicamente para hacer buñuelos, en nuestra casa ahora hacemos nuestra propia versión de esta harina. El "Colmaiz" es una mezcla de fécula de maíz, polvo de hornear y almidon de yuca.

A esta harina se le adiciona en partes iguales queso semiduro, queso costeño para ser exactos, un poco de agua y huevos, si lo desea. se mezcla y se ponen a fritar. Normalmente si te queda bien preparada la masa, los buñuelos crecen y se voltean solos. ¡Es una delicia!

Pero como hoy estoy aquí para antojarlos pues: imaginense si esos buñuelos los acompañan con un des amargado, un manjar blanco y un poco de natilla de maíz. un tipi plato navideño valluno.

Como tip, si dejan que se caliente bien el aceite los buñuelos quedan secos, sin grasa. La prueba para el calor es adicionar al aceite caliente una bolita pequeña de masa. Si esta bolita sube en máximo 5 segundos a la superficie del aceite, puedes adicionar tus buñuelos. Los puedes hacer redondos o alargados. Teniendo en cuenta que siempre deben tener una forma mas bien redondeada.

 Algo que nunca pudimos controlar con la harina que hacemos en casa es el color. Como ven en las fotos los buñuelos los sacamos del aceite cuando están como en la foto uno. Una vez afuera se ponen mas oscuros, nunca supimos por que. Nos han dicho que es por que nosotros compramos el queso en bloque y lo rayamos en vez de comprarlo molido.


Nuestro concepto es que con el queso rayado quedan con mas sabor del mismo. Con el molido en cambio parece apretarse más. ¿por que no pruebas? El Colmaiz es una buena opción, incluso mejor que la harina de caja. Anda, animate, prepara los tuyos con un buen café.

viernes, 25 de noviembre de 2016

¿Es posible hablar de vos, sin un aguacero?

Hace mucho tiempo no paraba a escribir sobre vos, sobre esos ojazos negros que te gastas, sobre ese andar inseguro y tu manita que me abriga a media noche .
Hoy llueve bastante por estas tierras y paro a preguntarme si se necesita un aguacero así de gigante para que vos aparezcas como una dios entre la lluvia y me invites a bailar sobre los charquitos de mi cabeza y vayas llenado conmigo esos huecos que se ven desde lejos cuando caminas.

¿Es posible hablar de vos, sin un aguacero? sin esas gotitas de mimos que dejas caer sobre mi cada mañana, sin esa ternura y esa paciencia que aparece como jordanas de sol o esos truenos tuyos que suelen ser "no estoy de humor para eso, Dahiana".

Implacable y justa , como este aguacero. Parece que te unes con la lluvia para hacer que te piense y para gotear en mi cabeza las imágenes mas absurdas, bellas y obscenas de nuestra historia.

Vos sos un aguacero espanta bobos, de esos que llueven y luego no. Pero también, sos de esos melódicos que van mejorando con el tiempo, que pegan en la ventana y te hacen dormir.

Esos que llegan con un frío de madrugada para hacerte pecar y dejarte en cama. Y yo no se que me pasa, si soy de azúcar o miel, pero soy un material que se disuelve en vos, todas las veces que llueves.

martes, 22 de noviembre de 2016

Sentencia de muerte...

Y si pensaban que antes era un asco. Prepárense que se viene lo peor.
A partir de este momento JURO que las cosas jamás volverán a ser como antes.
Porque me cansé de ser la bolsa de boxeo del universo, la que sufre por quien no lo merece, de ser la que todos pisotean, de siempre estar para quien nunca estuvo...
Más que una advertencia, es una sentencia.

Rodando en bici

Rodando por la ciudad, un placer inigualable. Me hacia falta volver a vivirlo. Esa sensación de salir en la bicicleta, sudar, liberar tensión, le cansancio, todo me hacía falta.

El pasado domingo pude por fin volver a recorrer algunos kilómetros, espero poder repetir el plan este próximo. Mi cuerpo lo pide, mi mente lo pide y mis piernas lo desean. Extrañaba esa sensación de rodar, el roce del caucho al andar, el sonido de la cadena contra los piñones.

Rodar por la ciudad, algo que me gusta hacer y que espero repetir. Un plan al que deseo sacarle tiempo. Un plan al que me puede invitar cuando deseen.