sábado, 26 de marzo de 2016

¡Cuanto extraño mi Brigada 145!


A eso de las 8 de la noche del pasado 25 de marzo de 2016, viernes santo según el calendario litúrgico católico, pasó por mi casa la procesión del santo sepulcro encabezada por unos doce monaguillos vestidos de albas blancas y sobrepelliz rojos que se repartían los símbolos, el incienso o sólo ocupaban un espacio en la formación; detrás de los monaguillos y el diácono, venía la banda músico marcial,  sí, no banda de guerra como se les decía hasta hace un tiempo, la Brigada 145 Los Xionas de Cali como cada año, cambia su repertorio para participar, a petición de su fundador y director, el comandante Alveiro, en las celebraciones de Semana Santa.
Este año vestían como acostumbran el viejo y tradicional uniforme que los identifica como guías exploradores, a la cabeza iba el comandante general de los guías exploradores del Valle del Cauca y comandante y director de la banda, Alveiro Patiño, me sorprendió gratamente ver que iba dirigiendo al grupo mientras tocaba un bombardino o barítono (así le conocen en la banda), detrás de él, marchaba el resto del grupo normalmente católico que acompaña estos eventos, tocando impecablemente su repertorio de semana mayor, es tradición que la banda cambie su repertorio alegre y festivo por uno sacro y triste.

¡Como sonaban de bien!

Al verlos y escucharlos pasar, el primer pensamiento que pasó por mi mente fue la nostalgia, nostalgia por esos tiempos en que yo hacía parte de mi banda y en qué no me perdía un desfile, ensayo o lo que fuera, cuando era feliz tocando o hablando, siendo regañado, volteando, jugando y compartiendo con seres maravillosos.

Lástima que ahora el tiempo no me permita seguir activo.

Como extraño mi Brigada 145 llena de saxofones, clarinetes, trompetas, trombones, tubas, flautas, liras, percusión,  bombardinos entre muchos otros instrumentos que hacen de la Brigada una de las mejores bandas musico marciales del país.

miércoles, 23 de marzo de 2016

¿Que me has hecho?

A mi me encanta despertar pensándote, cada mañana quiero saber cómo amaneciste. Mi sonrisa aparece cuando me saludas, es como si el sol iluminara sólo para mí gracias a tu sonrisa y tus palabras.
Poco a poco me voy acostumbrando a hablar contigo, cada instante, cada momento, al punto que ahora mismo te extraño a lo lejos. No saber de ti se ha convertido en una tortura, tu sonrisa y tu voz en un bálsamo. ¿Que me has hecho? No se... Pero sigue haciéndolo. Me gustas, Ami, me gustas, eso lo tengo claro; quisiera tener el poder de manejar el tiempo para detenerlo cuando estamos juntos y hacer crecer las flores más bellas a tu lado.
Ahora mismo suspiro mientras escribo con la esperanza de que al leerlo, sientas que te hablo al oído.
¿Que me has hecho?... ¡Sigue haciéndolo!

martes, 22 de marzo de 2016

El día que dejó su facebook abierto.

El día que dejó su facebook abierto.
El día que dejó su facebook abierto, no pude evitar con curiosidad mirar entre sus tantas conversaciones. Veníamos de besos, abrazos, caricias y yo viajaba hacia atrás -asqueado de sus cosas y sus palabras- cada vez que el cursor revelaba un “te llevo té” ¿te llevo té?. ¿le llevás té? ¡andá! ¡andá y pregúntame con coraje si hablo de vos!. Me quité la camisa, guardé algunos motivos para volver a hablarte en mi mochila, le hablé a unas tantas. Pacte citas, necesitaba sentir que intento borrar. Al final tenés razón, lo tuyo es el turismo emocional, andar de un corazón a otro derritiendo con letras, llevar tés, señorita del servicio.
Tenés razón porque eso es lo que querés, al final no soy diferente de esos idiotas que te han tocado con intención de hacerte daño, de prepararte. Y fui tan idiota de llevarte conmigo, de dejar que vinieras, que vinieras a mi cuerpo, que lo disfrutaras, de besarte con la pasión que a otros les falta.
Tenía razón, debí de haberlas borrado. Todas y cada una de las fotos. Era un acto de venganza, exclusivo para el momento en que querás mirar tu teléfono y ahí esté yo. Y tengás que pensar si borrarlas o no. Y borrarlas con certeza o guardarlas esperándola. Un idiota muy dulce. Un idiota que te compartirá estas letras y que no va a responder ninguna pregunta. 
Y él –mi amigo, al que le he contado todo-también tenía razón, esto es patético
Quizás yo soy patético, quizás siempre lo he sido. Quizás sólo quise arrastrarte a las puertas de mi mundo y tirarte lejos de aquí.
Quizás esa fue la única manera que te quise, en la que te quiero, en la que voy a quererte.
Debiste anticiparlo neni, mis miradas despectivas están llenas de dulzura, de cariño, de una apariencia de quietud.
Y lo mejor que puedes hacer vos, es guardar silencio.
Como es lógico, estoy lleno de resentimiento, soy un resentido y esto no hace sino alargar la lista de cosas que me hacen un hijo de puta.
Game over.
Game Again?
¡Qué talento para herir Dahiana! ¡Qué talento!

Cuento corto





Para ver el mundo en un grano de arena,
Y el Cielo en una flor silvestre,
Abarca el infinito en la palma de tu mano 
Y la eternidad en una hora
.
William Blake

Y mientras duerme la princesa, el caballero la espera.. La aguarda.
Toma de su saco un deseo,
y lo guarda en la ventana,
espera la media noche,
rogando al cielo y a la estrella lejana,
pide con todas sus fuerzas,
dejar de ser una rana. Pero al otro dia ella duerme,
y el no llega para verla,
espera,
siempre espera,
el dia para tenerla. Y dice junto a la cama:
- Cuando me mire y sepa,
que "caballero y rana", 
son cosas insignificantes 
cuando uno ama con toda el alma. 
Que ser pobre no es deshora , 
deshonra es no admirarla,
que la plata se consigue, 
que uno vuela sin alas. 
Que uno puede amar, 
sin necesidad de tener nada. La princesa sigue en sueño, 
El no deja de pensarla, 
más allá de su maquillaje Él sabe, èl lo sabe, 
que no tiene maquillaje su alma. Que no es su cara,
que no es su ropa,
que no es nada que no puede compararla,
que debe tener fé en el deseo,
en esa estrella lejana…

¿En qué radica la libertad?

Libertad, quizá es una palabra mas que se adhiere a nuestra garganta sonora rítmica y hueca. Agujerando trazo de ilusiones entre burbujas de letal gas que al reventarse queman una verdad; Hiere y cuan rustica falacia es esta vil palabra libertad; definida por quien, nadie sabe, suena tan limpia tan simplemente llena de nada. desgraciada que contagia con anhelos nuestro espíritu sangrante como leguleyas satisfactorias representas a un sin fin de saharas.

Porqué existe "Libertad" Quizá lo haces para darme sueños inalcanzables, utópicos; me empollas como larva que escudriña y escudriña, hallando en su ultimo y efímero movimiento alas, alas llenas de imperturbable, contradictoria e inagotable aire de Libertad; en ello radicas volar sin alas simplemente volar.    

lunes, 21 de marzo de 2016

Pena...

Pena, según la RAE podríamos decir que es vergüenza, pudor, culpa, timidez. La pena la podríamos resumir como esa sensación maldita que aveces nos impide hacer cosas que en realidad queremos o deseamos realizar, experimentar o vivir pero que puede mas el pudor o el miedo al ridículo, al rechazo.

¿Cuantos besos hemos dejado de dar o recibir por pena?, ¿cuantas exposiciones académicas o laborales nos hemos arruinado por pena? ¿cuantas oportunidades perdidas?. Tan difícil que es liberarse de ella y cuan gratificante es cuando se hace, las sensaciones son magnificas, por ejemplo cuantos magníficos besos se han dado venciendo la pena, mordiscos, masajes, incluso cuantas deliciosas y no planeadas invitaciones y salidas hemos vivido una vez vencida la pena.


Usando el otro significado que la RAE le da a esta palabra, da pena como pasan experiencias nunca vividas por culpa de ese sentimiento que llega a dominar toda nuestra vida. Desafortunadamente la única solución para esta situación es enfrentándola de frente, con el tiempo, se le pierde el miedo e incluso, se llega a necesitar estar en esas situaciones por que la adrenalina que produce se puede volver adictiva.

El problema está en enfrentarla, ¿como vencer la pena de actuar si precisamente la forma de hacerlo es actuando?. Quizá, aprendiendo a ser seguros, preparándose, aprendiendo de las derrotas y las victorias pero sobre todo con el tiempo. Nada se pierde con intentar, por el contrario, se adquiere experiencia ya que hasta de las malas experiencias podemos sacar lecciones de vida. Así que, ¿que esperas?